Muchas veces lo escuchamos en los talleres de Constelaciones Familiares que organizamos; y, también, de otras personas que no son científicas, pero que así nos lo transmitieron: la carga de información, y energía, que queda en las mujeres tras acostarse con hombres. Y es que, en un estudio de la Universidad de Seattle y el Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson, se descubrió la sorprendente información por accidente, ya que originalmente intentaba determinar si las mujeres que habían estado embarazadas con un hijo podrían estar más predispuestas a ciertas enfermedades neurológicas que ocurren con mayor frecuencia en los hombres. Es decir, que las mujeres retienen y llevan el ADN viviente de cada hombre con quien mantienen relaciones sexuales.
Y es que el cerebro femenino es todavía más misterioso de lo que se pensaba. Ya que las mujeres, muy a menudo, albergan Seguir leyendo