¿Sabías que allá por el año 1500 a. de C., en la zona norte de Mesopotamia, ya se tiene registro, en una tableta, del comercio de manzanas? Pues bien, en aquella época, cualquier persona que permitiese que el fuego destruyese un huerto de manzanas, bajo la ley hitita, era multada con tres shekels (moneda de Israel). Actualmente, se cultivan del orden de 7500 variedades de manzanas en el mundo.
Aparte de ser un alimento muy versátil, aparte son deliciosas y muy jugosas. Hoy, ya que es tiempo de recogida de las manzanas en nuestra tierra (se dice pañar en Asturies, el hecho de aquellas manzanas recogidas para hacer sidra), os vamos a acercar sobre sus propiedades y/o beneficios, como por ejemplo sus propiedades antioxidantes así como su capacidad combativa frente al cáncer: así una manzana al día, puede mantener a raya el cáncer colorectal, como evidencia un ensayo clínico controlado en julio de 2012 (no existe otra fruta que se asocie con la alteración del riesgo del cáncer colorectal, ya que cuanto mayor sea la ingesta, mayor será el impacto). Con lo cual, esas referencias pueden, por sí solos, ser suficiente para denominarlas un súperalimento.
Las manzanas son especialmente ricas en vitamina C; pero también proporcionan vitamina A, un poderoso antioxidante para ayudar a resistir infecciones y eliminar los radicales libres que causan la inflamación. También contienen una cantidad importante de fibra, que puede ayudar a prevenir la absorción del colesterol LDL (malo). Las manzanas son una buena fuente de vitaminas de complejo B como la riboflavina (vitamina B2), la tiamina (vitamina B1) y la piridoxina (vitamina B6). Nos aportan hierro, cobre, zinc, fósforo, calcio y potasio, que son componentes importantes para ayudar a controlar la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Así como los flavonoides y nitratos en las manzanas, pueden proteger contra las enfermedades cardiovasculares al reducir la presión arterial.
Las manzanas contienen más antioxidantes que cualquier otro alimento y la cáscara es aún más potente que la carne. Sin embargo, las manzanas son uno de los alimentos más contaminados con pesticidas, así que es mejor adquirir manzanas orgánicas. Así como aquellas personas con problemas de azúcar en sangre, debe consumir manzanas con moderación debido a contienen fructosa, que puede ser perjudicial en cantidades excesivas.