Microbiótica

La microbiótica viene a ser, ya que es un término muy reciente, el enfoque mediante el cual se busca solucionar los problemas que aparecen en la vida a través del caos y la destrucción (entropía), pero mediante la utilización de los microorganismos que regeneran la vida y la potencian (sintropía). O también, que es la ciencia que estudia la simbiosis entre la microbiota y el terreno en el que habita; es decir, la ayuda mutua que se produce entre un organismo simbionte anfitrión y su microbiota residente o huésped. De paso, también podemos llamar la atención sobre dos tipos de microbiótica:
– exterior: con la búsqueda del equilibrio entre la biosfera y la humanidad (ganadería, agricultura, limpieza de aguas, etc).
– interior: con la búsqueda de la salud en el conjunto del ser humano o cualquier otro ser vivo.

Y llegamos hasta esta nueva disciplina, condicionados, en nuestra misión de utilizar y comercializar los mejores productos para con nuestra salud, por la tan expandida y expansiva cultura bacteriófica que abarca desde la obsesión por una higiene total de nuestros hábitats, hasta la peligrosa saturación de antibióticos que padecemos, bajo la gran influencia interesada y ejercida desde la poderosa industria farmacéutica.

Porque, si nos detenemos con algo de calma, tiempo, inteligencia y, porque no, un poco de curiosidad, es fácil llegar, con la ayuda adecuada, a  la afirmación de que si las bacterias y virus fuesen tan patógenos como nos cuentan, seguramente, no duraríamos ni un segundo sobre el planeta Tierra. ¿Por qué? Pues, sencillo, porque según los últimos cálculos llevados a cabo por los científicos, actualmente en La Tierra existen bacterias en un número, diez mil millones, superior a la cantidad de estrellas que se calculan que hay en el Universo; y, en cuanto al número de virus, estaríamos hablando de entre 5 y 25 veces superior. Lo que lleva a afirmar, que los virus y bacterias, debido a su enorme cantidad, viven en una gran armonía. Y, es por ello, que la microbiótica viene a utilizar estos numerosos microorganismos (bacterias, virus, levaduras, hongos, etc), para que con su debida interacción contribuyan a favorecer la vida, deteniendo el caos y putrefacción (entropía) y generando orden y fermentación (sintropía).

Así que hemos decidido unirnos al movimiento que desde Microviver llevan a cabo, para difundir el concepto de la nutrición simbiótica con sus productos. Dichos productos, están siendo reconocidos por profesionales de la salud cada vez más, además de constatar los efectos beneficiosos de los probióticos ejercen sobre la salud y la nutrición humanas. Estudios científicos recientes sobre las propiedades y la funcionalidad de microorganismos vivos en los alimentos, sugieren que los probióticos desempeñan un importante papel en las funciones inmunitaria, digestiva, respiratoria y nerviosa, y que podrían tener un efecto significativo en el alivio de las enfermedades inflamatorias/infecciosas y otros grupos de alto riesgo.

A continuación te desglosamos las principales cualidades de los productos fermentados de Microviver. Así:
– Son superalimentos simbióticos que han sido fermentados de manera natural y llevan sustancias prebióticas y probióticas concentradas, sin pasteurizar en ningún momento del proceso de elaboración ni envasado, que finalmente generan reacciones posbióticas; y que con muy poca cantidad ingerida logran resultados intensos positivos en todo el organismo.
– Son alimentos vivos, que han sido fermentados y contienen por tanto microorganismos (bacterias y levaduras) regeneradores que entran en simbiósis con la microbiota intestinal y ayudan a recuperar el equilibrio natural del organismo, generando una producción extraordinaria de enzimas, vitaminas y sales minerales de gran biodisponibilidad para su asimilación.
– Potencian las propiedades de sus componentes, merced al proceso fermentativo del VIR, que extrae con gran eficacia los principios activos de las plantas e ingredientes alimenticios que llevan en su composición.
– Y, finalmente, son concentrados y, por ello, se precisan pequeñas dosis diarias.

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