Me toca rescatar otro post, que tenía en el antiguo blog. La verdad es que viene a dedo. Porque llega el gran momento para todos los fans y fanáticos de tiempos medievales: el poder hacer la ola ésta mañana por las calles de Madrid, a un nuevo sujeto que vamos a tener que aguantar por activa y por pasiva. Aunque, quizás, con la eliminación de otro tótem del estado español, la selección en el mundial de fútbol en Brasil, quizás muchos se bajen del autobús de esos fans y se pongan a hacer y reivindicar, por lo menos, lo que dice el texto de ese libro llamado Prostitución, digo Constitución. Podría añadir muchas y variadas cosas sobre el mismo, pero creo que sirve perfectamente lo escrito hace seis meses. Con casi medio siglo, sigo sin poder votar acerca de que modelo de estado deseo o prefiero…
(publicado originalmente el 06/12/2013) Realmente, y viendo lo despiertos que llegan las nuevas generaciones, puede ser la pregunta de cualquier chaval hoy día «¿Y yo puedo ser rey?» A lo que, cualquier padre o adulto, sin entrar en más discusiones ni elucubraciones, le tendrá que responder que «¡¡No!!» Entonces, qué haces si el niño en cuestión, vuelve a la carga con otra pregunta que diga «Y si somos todos iguales ¿por qué no puedo ser rey yo?» Y, si encima, el niño va para erudito y te cita que en el artículo 14 de la Prostitución, digo Constitución, en el que dice que «todos son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social». Ante esa situación ¿qué hay qué hacer? ¿llamamos a los cuerpos de fuerza y seguridad del estado? ¿pedimos asilo en Venezuela? ¿nos ponemos a silbar…?
En fin, que ya está bien de hacernos tontos (por lo menos a mí). Que si 35 años de celebración que vivimos en democracia, que si gracias a ella estamos como estamos (ahí tienen razón), que si en ella se fijaron otros muchos lugares para reflejar sus derechos… jajjajajajjajajajajaj. Es que, tenéis que entenderme, voy a reirme, y mucho, hoy. Para mi es el día internacional de la risa jajjajajajjajajaja.