No es la primera vez que se intenta producir plantas a través del riego con agua de mar, aunque regularmente se somete antes a un proceso de desalación. Sin embargo, en una zona costera del desierto de Atacama (Región de Antofagasta en Chile), un equipo de ingenieras chilenas han sido capaces de conseguir verduras (acelgas y tomates cherry) cultivadas con agua de mar natural, sin desalar. Además, y según la Universidad Católica del Norte de Chile, las verduras consiguen poseer más nutrientes que las cultivadas por métodos tradicionales.
La particularidad del proyecto (con un coste de 49.000 euros), consistió en que las plantas no recibieron el agua de mar por arriba, sino que Seguir leyendo