Hoy traemos la historia de un autor sufí: Idries Shah.
Esto era un hombre, después de muchos años de estudio y esfuerzo, descubrió cómo invocar a un genio.
Nada más aparecer, este le concedió tres deseos y lo primero que pidió fue mucho dinero. Se lo gastó viviendo a lo grande, pero terminó siendo un alcohólico. Entonces, el segundo deseo, por tanto, se vio obligado a desaprovecharlo pidiendo superar la enfermedad.
Llegó un momento que, al verse totalmente indeciso, con un único deseo por pedir y con aquella mala experiencia a sus espaldas, deseó volver a su estado original y olvidar todo lo que le había sucedido.
Por ello, es muy conveniente el medir las consecuencias de nuestros actos.