Como parece más un hábito que una costumbre, queremos ser partícipes del mismo. ¿Cuáles son nuestros deseos? Pues, queridos lectores y seguidores, en el plano material no vamos a desentonar, así:
- más negocio, y por ello más clientes
- más repercusión en social media, y por ello más amigos
- y, algo que nos olvidamos siempre, y, creemos, es la moneda más deseada… MÁS TIEMPO
¿Cómo que no? Pues nosotros queremos más tiempo para que nuestra web esté lista como nos gusta. Más tiempo para poder hablar con nuestros clientes/amigos. Más tiempo para disfrutar, de ésta vida tan apasionante que nos ha tocado vivir. También más tiempo para aprender.
Hoy día, todo está medido en tiempo, bien años, bien meses, bien días, bien horas, bien minutos, bien segundos e incluso, las milésimas nos son ya tan familiares en el deporte y otros quehaceres. Unos querrán que se acorten los plazos para acabar con los pagos de hipotecas y otros, sin embargo, desearán que no llegue la hora del embargo.
Pero como decimos, eso es en el plano material. ¿Y en otro plano? ¿Qué nos queda? Pues queda todo, mejor dicho nos queda mucho por desear y mejorar. Ayer recibimos un email de una amiga bloguera virtual (con la que desvirtualizaremos pronto) en el que nos hacía llegar el recuerdo de una gran fábula, la fabula del erizo.
Os recomiendo leerla si aún no la conocéis. Pues ahí es a donde queremos llevaros, a convivir un poco mejor cada día con los demás. Y ese es nuestro deseo para éste año que acaba de comenzar …
La mejor relación no es aquella que une a personas perfectas, sino aquella en que cada individuo aprende a vivir con los defectos de los demás y admirar sus cualidades.